Grandes cantidades de gas – que en la Tierra es producido principalmente por seres vivos – fueron registradas por tres enormes telescopios durante un estudio de siete años.

El nivel de actividad fue tan grande que a veces igualó la cantidad de gas liberado en algunos de los lugares más ricos en metano de la Tierra.

Los científicos dicen que se necesitan más investigaciones para determinar si el gas, detectado en 2003, fue creado por procesos biológicos de criaturas como microbios o por actividad volcánica.

“Los sistemas vivos producen más del 90 por ciento del metano atmosférico de la Tierra; el resto es de origen geoquímico. En Marte, el metano podría ser una firma de cualquiera de los dos”, dijo la NASA en un comunicado.

La sonda europea Mars Express recogió posibles evidencias de metano en Marte en 2004, pero el último descubrimiento de la NASA ha sido anunciado como el indicador más fuerte hasta ahora de que el planeta es capaz de soportar organismos simples.

El metano, que se detectó junto con el vapor de agua, podría haber sido un producto de desecho de organismos llamados metanógenos que viven en el agua debajo del hielo subterráneo, creen los expertos.

El profesor Colin Pillinger, cuya nave Beagle 2 se estrelló en Marte en 2003 mientras estaba en una misión para buscar signos de vida, dijo que el descubrimiento podría resultar importante.

“El metano es un producto de la biología. Para que el metano esté en la atmósfera de Marte, tiene que haber una fuente renovable”, dijo a The Sun.

“La fuente más obvia de metano son los organismos. Por lo tanto, si encuentra metano en una atmósfera, puede sospechar que hay vida