COVID-19
La ENFERMEDAD Covid-19
El Covid-19 es una enfermedad producida por el coronavirus SARS-COV2, el cual puede provocar una serie síntomas muy comunes que se encuentran también presentes en otras enfermedades y pueden ir desde un simple malestar general hasta una neumonía. En casos de pacientes inmunocomprometidos o con enfermedades de base, es posible el desarrollo de complicaciones inflamatorias y respiratorias que pueden incluso llevar a la muerte.
Los síntomas más comunes son compartidos con gripes estacionales y otros cuadros virales: fiebre, dolor de cabeza, tos seca y cansancio. Sin embargo, existen otros síntomas asociados a esta enfermedad como la perdida del olfato, del gusto y dolor muscular (mialgia).
En casos más graves se pueden presentar dificultad respiratoria, Síndrome respiratorio del medio oriente (MERS), Síndrome respiratorio agudo (SARS), sepsis, complicaciones neurológicas, accidentes cerebrovasculares, e incluso inflamación del cerebro hasta causar la muerte.
Transmisión del virus
El virus se transmite de persona a persona, mediante las llamadas microgotas de flugge, que salen de la boca de forma inadvertida cuando hablamos o tosemos y son inhaladas por otra persona, su periodo de incubación es de 2 a 14 días; periodo tras el cual comienzan a aparecer los síntomas.
DIAGNÓSTICO: la estafa de los PCR
En el año 1980, el químico estadounidense Kari Mullis (fallecido en agosto de 2019), desarrolló lo que conocemos como las PCR. El test realiza una reacción a las cadenas de polimerasa, y tiene la capacidad de replicar el ADN presente en un virus y magnificarlo hasta lograr su identificación.
Es un test controvertido y que arroja un alto porcentaje de falsos positivos, su propio creador manifestó en diferentes ocasiones que el test no era válido para detectar ningún tipo de virus, cuestión que también ha sido ratificada por las dos únicas sentencias judiciales hasta la fecha (septiembre 2020) que se han pronunciado al respecto en 2020.
Las PCR solo pueden identificar un número de 200 nucleótidos, mientras que los que se encuentran en un virus pueden llegar a los 29.903. Por ejemplo, en caso de estar presente en la persona un retrovirus, el test al amplificarlo puede como resultado un falso positivo. De hecho el aumento del factor de amplificación con el que se configura la prueba PCR, se traduce en aumento proporcional en el % de falsos positivos.
Pero ni siquiera es necesario tener cualquier otro virus para que la PCR de positivo, por ejemplo los casos en que la persona cada día dan un resultado distinto, además de positivos en muestras no humanas: plantas, animales y hasta muestras de simple agua han dado positivo.
Como ejemplo representativo dejamos el del presidente de Tanzania: John Magufuli, quién manifestó públicamente en mayo de 2020, que envió muestras con nombres de personas a analizar con PCR, y dieron positivos una papaya, una cabra, un ave… Tras estos resultados Magufuli embistió contra la OMS, y también comentó en que se estaba utilizando el terror para manipular a la población y se estaba magnificando todo lo relacionado con la pandemia.
El presidente de Tanzania falleció por «complicaciones cardiacas» el 17 de marzo de 2021, diez meses después de haber emitido sus declaraciones de denuncia contra lo que él consideraba como falsa pandemia.
Las PCR han sido utilizadas a nivel mundial como principal prueba diagnóstica, y han servido como base sobre la cual se han tomado tanto los datos como las decisiones a nivel mundial y a nivel local (políticas, sanitarias, restricciones, confinamientos…
DATOS manipulados
Comencemos por explicar que para saber la peligrosidad de un virus, es necesario establecer dos conceptos básicos: morbilidad y mortalidad de este.
Morbilidad se refiere al número de población que se contagia en un determinado lugar y periodo de tiempo, y se establece una comparativa porcentual con el número de personas sanas.
Mortalidad establece la comparativa porcentual con el número de personas que mueren a consecuencia de la enfermedad en sí.
Si bien se ha podido determinar (con diagnósticos de PCR no confiables) que el virus SARS – COV2 cuenta con una tasa de morbilidad elevada, de igual forma se ha podido constatar los bajos índices de mortalidad, representando escasamente de un 0.6 al 1% del total de casos diagnosticados. (porcentaje similar a la gripe común)
Establecemos como datos manipulados toda la información concerniente a las tasas de morbilidad y mortalidad del Covid-19, ya que se debe comenzar por comprender que careciendo de un método realmente confiable para su diagnóstico y el establecimiento de conceptos como «enfermos asintomáticos», estamos claramente ante cifras infladas que solo buscan aumentar el temor en la población ante un virus que no tiene ni la capacidad de contagio, ni la mortalidad que se pretende hacer creer.
Accede a información estadística en tiempo real aquí
Los datos ofrecidos sobre la mortalidad del virus, claramente han sufrido de exageración desde sus inicios. La información ha sido manipulada con total intencionalidad, pasando de hecho por evitar que a las víctimas declaradas como fallecidas a causa del SARS-COV2, se les practiquen autopsias que determinen la verdadera causa de muerte.
Una finalidad ha sido establecer la inoculación de sustancias experimentales o con permisología de vacunación acelerada a población completamente sana. Casos como el de Francia, demuestran como con una tasa de morbilidad y mortalidad de procedencia dudosa, han llevado a millones de sus ciudadanos a inoculaciones obligatorias.
Otras FALSEDADES
Dentro de la manipulación de datos del Covid-19, se ha pretendido hacer creer a personas sanas que se encuentran enfermas bajo la figura del «asintomático«. Por primera vez en la historia de la medicina se habla de la posibilidad de portar y estar desarrollando una enfermedad sin presentar ningún tipo de síntoma.
La figura del asintomático surgió al buscar como explicar que algunos test PCR daban como positivo en personas aparentemente sanas. Era más fácil ante toda la matriz de manipulación creada, establecer que una persona sana en realidad estaba enferma, pero sin síntomas, que admitir que el test PCR NO era fiable para detectar o no casos reales de enfermedad.
Aun cuando la figura del asintomático nunca ha existido, diversos medios de comunicación, prensa escrita y diarios digitales, afirmaban que si existía, y que las personas sin síntomas igual podían contagiar a comunidades sanas. Artículos informativos se dieron a la tarea de desacreditar a profesionales de la salud que han negado esta versión y se les ha tildado de negacionistas.
Ante tantas cadenas de desinformación y manipulación, Anthony Fauci se manifestó, no para negar la existencia de los asintomáticos, pero si para negar que puedan ser transmisores del virus. Obviamente NO son transmisores del virus porque sencillamente no lo padecen. Son personas sanas engañadas con un falso positivo de una PCR que no funciona.
El contradictorio uso de las mascarillas
Desde el inicio de la declarada «pandemia», se han establecido una serie de condiciones sobre la utilización de la mascarilla como preventivo de contagios. Desde un inicio la OMS recomendó su uso dentro de espacios cerrados; sin embargo, esta como tantas otras medidas fueron adoptadas por los distintos gobiernos del mundo a su manera.
En países como España llegó a establecerse la obligatoriedad de su uso tanto en espacios abiertos como cerrados, sucediendo lo mismo en varios países europeos y latinoamericanos. La ineficacia de las mascarillas para detener la propagación de virus ha sido ampliamente demostrada y el daño que puede crear a nivel emocional, social y de salud se ha evidenciado de manera bastante clara. Accede AQUÍ a una infografía completa sobre esta falsedad instaurada como «protección».
El miedo como mecanismo
Contrario a lo que se esperaría en una situación real de emergencia, el discurso de los organismos oficiales ha estado lejos de ser alentador. Desde la Organización Mundial de la Salud, se ha instaurado la política del miedo, la cual se ha diversificado por diversas aristas con el claro mensaje de: Esto está lejos de terminar.
La campaña de terror se ha generado principalmente a través del discurso de Thedros Adhanom, principal vocero de la Organización; quien mantiene una relación muy estrecha con el gobierno chino y con Bill y Melinda Gates.
En febrero de 2018 La OMS en palabras de su director advertía al mundo de que una pandemia podría surgir en cualquier parte del mundo, que podría matar a millones de personas y que no estábamos preparados. Estas declaraciones de Adhanom Thedros Director de la OMS parecían proféticas, pero esto fue solo el inicio.
A principios del año 2020 específicamente el 10 de enero, se publica una guía para prevenir y controlar infecciones por coronavirus. Durante los 3 primeros meses de la llamada crisis, la OMS tuvo una suerte de protagonismo en los medios de comunicación, hasta que el 11 de marzo de 2020, la OMS declara pandemia por covid-19.
Desde ese momento se desató una campaña donde la OMS atizaba el miedo y comenzó con el confinamiento. Aparte del confinamiento establecido en varios países, el Director de la OMS declaraba frecuentemente “No asumas que tu comunidad no se verá afectada, prepárate como si lo fuera. No asumas que no estarás afectado, prepárate como si lo fueras”
Las «VACUNAS» para el Covid-19
Comencemos por aclarar que lo que se está inoculando a buena parte de la población mundial, NO son vacunas, pues no cumplen con los procedimientos y protocolos que las designarían realmente con ese nombre.
Las «vacunas» del Covid-19 no son como las vacunas tradicionales
Se les ha denominado vacunas por ser el nombre más socialmente aceptado, pero una denominación más correcta para la «vacunas» predominantes para el Covid-19 sería: TERAPIA GÉNICA EXPERIMENTAL.
En este caso, el mecanismo de las principales «vacunas» Covid (Pfizer, Moderna….) está basadas en el ácido ribonucleico mensajero (ARNm) para estimular la respuesta inmunitaria, la cual es una técnica muy dudosa que hasta ahora no había sido probada en humanos, y los experimentos históricos con ellas en animales han sido un completo desastre.
Los laboratorios no nos mienten cuando en la documentación de las vacunas aclaran que, como es lógico, no se conocen los efectos adversos a medio y largo plazo, aunque si ya estamos conociendo los efectos a corto plazo, sin precedentes en comparación con las vacunas históricas, tanto en gravedad como en porcentaje de afectados, hechos que los medios de comunicación están ocultando o minimizando (postura lógica teniendo en cuenta su campaña en meses anteriores repitiendo hasta la saciedad que estas vacunas son seguras y efectivas)
En concreto son dos efectos adversos a medio-largo plazo que más preocupan a los profesionales independientes: el daño al sistema inmunológico y la infertilidad.
Podría decirse que tras la inoculación de una vacuna ARN el sujeto pasa a ser un organismo genéticamente modificado -> transgénico. 😳 No se conocen las implicaciones que pueda tener ello en el futuro.
Las «vacunas» están en fase 3 de experimentación, y han sido «aprobadas» por emergencia
Otro detalle que suele minimizarse u ocultarse a la población, es que las vacunas Covid actualmente son un experimento en el cual están participando los inoculados, y han sido «aprobadas» por emergencia ante la «ausencia de tratamientos efectivos contra el Covid»?? -> ¿Dónde quedan el Dióxido de Cloro, la Hidroxicloroquina y la Ivermectina? Tratamientos efectivos, silenciados y difamados que cumplen su misión con un coste menor a 1$ al día, y que de haberse reconocido habrían impedido la aprobación de emergencia de las «vacunas»
Repasando el histórico de las vacunas Covid-19, al principio los laboratorios hablaban de más de un 90% de efectividad con dosis única. A fecha de agosto de 2021 ya se está asumiendo la tercera dosis y dejando caer una cuarta dosis + una vacunación anual.
Para concluir diremos que:
Las vacunas experimentales Covid-19 y sus contratos ocultos
Los contratos entre los laboratorios que producen las vacunas y los gobiernos que las compran, son realizados de forma privada y no se les permite el acceso a la información contenida a los ciudadanos. Ante diversas presiones efectuadas por parte de Eurodiputados, finalmente tuvieron acceso al contenido de los contratos… o mejor dicho, solamente a lo que las empresas decidieron que se podía acceder.
El Eurodiputado Rumano Cristian Terhes, denunció abiertamente la censura de la que es objeto el contrato, y la falta de transparencia hacia la ciudadanía con relación a efectos secundarios y establecimiento de responsabilidades.
Un caso similar se ha dado en el otro lado del mundo, específicamente en Colombia, país suramericano en el que se abrió una investigación ante la «filtración» de los contratos. Lo que ha causado más revuelo, es la total ausencia de responsabilidad por parte de los laboratorios, ante los efectos secundarios de su vacuna; aclarando de hecho, que no asumirán responsabilidades de ningún tipo ante efectos secundarios, daños emocionales, muerte o incapacidad después de su aplicación…
En el siguiente video podrás observar la intervención del Eurodiputado Rumano Cristian Terhes y la denuncia que a través de un medio de comunicación colombiano se ha efectuado.
Hasta ahora ningún país del mundo ha permitido el acceso público a la información contenida en los contratos, por lo que la colectividad se ha inoculado sustancias experimentales sin conocer ningún detalle.
FARMACIA
La actuación de la industria farmaceútica se ha dirigido al desarrollo de vacunas y no de tratamientos para atender y recuperar pacientes afectados por el SARS COV2. Tratamientos aprobados, así como terapias alternativas han sido completamente criminalizados.
La rueda que gira en torno a la actuación de esta gran industria, simplemente se ha limitado a poner todos sus esfuerzos en inocular sustancias experimentales, en lugar de apostar por la salud de los ciudadanos.
Sigue este enlace para ampliar información sobre farmafia y su alcance
TRATAMIENTOS que han demostrado ser efectivos para acabar con el Covid-19
Dióxido de Cloro🔗
El dióxido de cloro ha sido utilizado para tratar la malaria desde 1996, cuando fue utilizado por un caso de emergencia en la selva por el ingeniero Jim Humble; si bien, este descubrimiento se hizo de manera fortuita, el dióxido no ha dejado de ser empleado para salvar vidas desde entonces; y en 2007, gracias a haber comprobado en sí mismo los efectos de esta terapia, el investigador Andreas Kalcker comenzaría a analizarlo para el tratamiento de otras patologías.
A raíz del inicio de la declarada pandemia de Covid-19, en marzo de 2020 la Asociación Ecuatoriana de Medicina Integrativa (Aememi) efectuó un estudio en 104 voluntarios, a los cuales se les suministró dióxido de cloro para el tratamiento del Sars-cov2. Los resultados fueron sorprendentes, pues el 100% de los voluntarios logro una recuperación completa. Accede aquí al informe del ensayo debidamente notariado.
Desde mayo de 2020, debido al aumento de casos de Covid-19 declarados y a los niveles de mortalidad que se manejaban de manera oficial, un grupo de médicos decide conformar la Coalición Salud y Vida. Su objetivo inicial era abordar la situación de salud que se estaba suscitando, de manera efectiva con tratamientos que permitieran un mayor número de pacientes recuperados.
Como método terapéutico, los médicos de la COMUSAV, coalición que en la actualidad está constituida por más de 4000 médicos de todo el mundo; utilizaron terapias con dióxido de cloro (CDS) logrando un porcentaje de recuperación exitosa sin ningún tipo de efecto secundario relacionado con su utilización.
Aun, cuando son miles de profesionales de la salud los que han demostrado la efectividad del dióxido de cloro como alternativa para lograr la recuperación de los pacientes que padecen la enfermedad, la campaña de miedo ha estado dirigida a minimizar su eficacia y a exaltar que lo que están consumiendo los pacientes es lejía…
El caso de Bolivia fue ejemplo para el mundo, cuando se aprobó la elaboración, suministro y uso del dióxido de cloro como preventivo y tratamiento para la pandemia de Covid-19 a nivel nacional. Mientras que en Perú, se encuentra en debate el proyecto para aprobar su utilización como coadyuvante para el tratamiento del Covid-19.
Accede a la cronología sobre el Dióxido de Cloro acontecida durante la Plandemia
Hidroxicloroquina
Uno de los medicamentos que se suministró a los pacientes con Covid-19 en China, se trató de la cloroquina. Esta, al ser un fármaco con propiedades antiinflamatorias e inmunomoduladoras que fue efectivo ante el virus SARS-CoV-1, se utilizó en el país asiático con resultados positivos, logrando acortar el cuadro clínico y desarrollo del virus.
La hidroxicloroquina comenzó a ser utilizada por ser similar a la cloroquina y tan efectiva como esta, pero mejor tolerada por los pacientes.
El Centro Andaluz de Documentación e Información de Medicamentos (Cadime), llegó incluso a publicar un estudio abierto no aleatorizado que se efectuó con este fármaco en Francia. En dicho estudio se obtuvo un éxito de recuperación al 100% de aquellos pacientes tratados con hidroxicloroquina combinada con azitromicina.
42 pacientes con infección por COVID-19 (virus SARS-CoV-2), de los que 14 fueron tratados con hidroxicloroquina sola, 6 con hidroxicloroquina + azitromicina frente a 16 controles sin tratamiento. La dosis de hidroxicloroquina fue de 200 mg 3 veces al día durante 10 días; y la de azitromicina, utilizada para prevenir la sobreinfección, 500 mg el primer día, y 250 mg/día durante 4 días.
A los 6 días de tratamiento la carga viral en secreción nasofaríngea fue negativa en el 57% (8/14) del grupo de hidroxicloroquina, 100% (6/6) del grupo de hidroxicloroquina + azitromicina y en el 12.5% (2/16) del grupo sin tratamiento.
Si bien este fármaco mostró una buena taza de recuperación de la salud de los pacientes, el mismo fue prohibido por la OMS como tratamiento para el Covid-19. No obstante se hizo una aclaratoria:
Accede al pronunciamiento oficial de la OMS sobre la hidroxicloroquina.
Ivermectina
Sigue el DINERO
Desde la declaración de «pandemia», el financiamiento otorgado a hospitales y comunidades autónomas, gobernaciones, alcaldías o distritos, según el nombre asignado en cada país a su división territorial, ha sido proporcional al número de casos de Covid-19 detectados, al número de pacientes intubados y al número de decesos que se han registrado a «causa» del SARS-COV2.
Según declaraciones del presidente de Bielorrusia Aleksandr Lukashenko, el Fondo Monetario Internacional había ofrecido financiamiento a su país para el tratamiento adecuado de la situación acarreada por la pandemia, a lo que este respondería de manera negativa. El caso de este mandatario es uno como el de otros jefes de estado que se han negado a llevar adelante el discurso programado por la OMS.
Financiamiento: caso España
En España se ha declarado de manera abierta y formal a través del Boletín Oficial del Estado (BOE) la forma en que los fondos económicos son distribuidos en las comunidades autónomas según los casos de Covid-19 detectados y el número de test realizados.
Si hacemos una comparativa entre las sumas de euros asignados por pacientes diagnosticados, internados y fallecidos, valdría la pena cuestionarse si acaso no es conveniente para las comunidades autónomas tener un gran número de pacientes con la finalidad de recibir más recursos por parte del Estado. Por una simple PCR, cada hospital percibe 93 €, mientras que los montos ascienden cada vez más según el tipo de cuidados que requiera el paciente, ej: Alta hospitalaria para COVID-19 sin estancia en UCI con menos de 72 horas = 2500€, estancia superior a 72 horas = 5000€
Aunado a toda esta situación, hemos establecido lo poco fiables que son los test PCR y las evaluaciones diagnósticas. A ello, sumemos la prohibición de autopsias para conocer las verdaderas causas de muerte… todo parece comenzar a tener sentido… Accede al BOE en este enlace .
Accede a la información oficial de casos Covid-19 en España en este enlace.
Manejo económico en Colombia
No solamente en España se ha sostenido un financiamiento según la gravedad de los supuestos casos diagnosticados de Covid-19. En Colombia, se ha denunciado como, gracias a los pacientes con diagnóstico grave se han logrado llenar más económicamente los hospitales y clínicas por los pagos especiales recibidos.
Manejo de la Plandemia en Suecia
En Suecia se fue a contracorriente en comparación con otros países europeos y se confió en la responsabilidad individual de sus ciudadanos para el manejo de las medidas de control sanitario. No se impuso el uso del tapabocas ni se llegaron a cerrar negocios.
Anders Tegnell, epidemiólogo y jefe de medidas sanitarias en dicho país, ha afirmado que la población apoya las medidas implementadas, lo cual ha conseguido que la tasa de contagios sea realmente baja.
Sin embargo, ante la insistencia de países vecinos y los controles recomendados por la Unión Europea, en este país comenzaron a adoptarse medidas como prohibición de campamentos infantiles, y reuniones en locales nocturnos y la inoculación no obligatoria de las llamadas vacunas. Desde el mes de junio de 2021, estas medidas se encuentran en vía de flexibilización nuevamente.
Muerte de presidentes catalogados como «negacionistas»
La muerte de varios líderes políticos africanos que se opusieron a las normativas obligatorias de la OMS sorprendió al mundo, ya que en todos los casos: Tanzania, Costa de Marfil, Suazilandia y Burundi; los políticos gozaban de buena salud. Ahora bien, diversas páginas web dedicadas a ser Fact Check (verificadores de información) han asegurado que la muerte de estos ciudadanos no tienen nada que ver con su postura ante el Covid-19.
Así mismo, se han expresado de igual manera sobre el asesinato de Jovenel Moïse, presidente de Haití que se negaba a la aplicación de las vacunas experimentales en su país.
MEDIOS DE COMUNICACIÓN
El papel de los medios de comunicación ha sido determinante para los intereses de la Plandemia. Todos parecieran estar siguiendo un mismo libreto, y en realidad, así es. El control del 96% de todo lo que ves, escuchas y lees, se encuentra bajo el control total de cuatro grandes corporaciones, conectadas entre sí y pertenecientes a las mismas manos.
Una operación de marketing del terror se ha estado generando en la psiquis de los ciudadanos a nivel mundial, y durante más de un año y medio, el mensaje transmitido por los medios ha sido claro: estamos ante una pandemia mortal que no tiene cura y para la cual, la única opción es dejarte inocular una sustancia experimental llamada “vacuna”.
Curiosamente, las grandes corporaciones que son dueñas de los medios de comunicación, y por ende controlan los mensajes que recibes la 24 horas del día; son también las principales accionistas de los laboratorios que producen las “vacunas”, cuya administración global está enriqueciendo aún más a la industria…
Para descubrir cómo se relacionan el poder de los medios de comunicación, sus accionistas y su relación con la situación actual de la Plandemia y las «vacunas», sigue este enlace.
Desde su creación, las redes sociales venían cumpliendo la misión de ser un medio de comunicación masivo eficaz para compartir los acontecimientos en caliente sin ningún tipo de censura.
Con el tiempo todo esto iría cambiando, y la censura política comenzaría a quedar en evidencia. El poder de los dueños de las redes sociales se ha incrementado, y sus acuerdos y convenios con organismos oficiales y élites de poder, han avanzado hasta el punto de censurar o exponer como falsa cualquier información que vaya en contra de lo que le interesa a las grandes corporaciones.
Específicamente durante la declarada pandemia, desde la OMS se han emitido órdenes para censurar cualquier opinión disidente o crítica y plataformas como Google y Facebook se han encargado de financiar a redes de “verificación” que sentencian como falsa cualquier información que les sea incómoda.
Gracias a la acción coordinada entre los grandes medios, las redes sociales, la OMS y otros organismos, así como médicos y personal sanitario alineado con el discurso oficial, se ha llegado a generar el término «negacionista» y bajo este nombre se señala y se expone públicamente a cualquier pensamiento crítico.
Para conocer el nivel de censura que se ha alcanzado en las redes sociales, sigue este enlace.
ETIQUETADO «NEGACIONISTAS»
En todo el mundo se ha generado el término «negacionista» para «identificar» o describir a todo aquel que sea contrario al discurso oficial de la OMS y de las otras instituciones tanto políticas como de control económico que le secundan.
Es necesario aclarar que, aun cuando esta palabra se ha utilizado para este fin, no todas las personas que son contrarias a las normativas aplicadas, niegan la existencia del virus. Ante la gran cantidad de personas con pensamiento crítico, el surgimiento de la etiqueta «negacionista» se ha instaurado para ridiculizar a todo aquel que siendo profesional de la medicina, o no, se atreva a cuestionar los más absurdos planteamientos.
FACT CHECK – Verificadores de información y «dueños de la verdad»
El surgimiento de las denominadas fact chek se dio en el año 2003, y desde ese momento su función ha sido dirigida hacía catalogar como cierta o falsa la información que se presenta en diversos medios de comunicación o redes sociales. Si bien en un inicio su actividad se dirigía a desenmascarar informaciones en el mundo de la política, con el tiempo comenzaron a influir en las tomas de decisiones del electorado según la conveniencia de su línea editorial.
Con los años las fact check han crecido de forma exponencial y en la actualidad han jugado un papel determinante para reforzar las versiones de la OMS sobre el Covid-19 y catalogando como información falsa todo lo que sea expresado por investigadores y científicos que expresen su punto de vista sobre la actual situación y que planteen tratamientos alternativos a la vacunación experimental.
Las fact check reciben financiamiento de diversas organizaciones de carácter «filantrópico», entre ellas las llamadas BigTech de las cuales Facebook y Google forman parte y entre quienes se ha aportado una cifra superior a los 400.000$.
Aun cuando esta organización «verificadora» se ha impuesto como dueña absoluta de la «verdad», su misión no es investigar ni contrastar las informaciones. Solo se limitan a silenciar a las voces disidentes y repetir como verdadero aquello que establece la OMS y las empresas que los financian.
Si quieres saber cómo operan las Fact Check, su financiamiento y su alcance sigue este enlace.
CENSURA, esa es la orden
Los niveles de censura han llegado a niveles nunca antes vistos en torno al Covid-19. En los medios de comunicación, prensa escrita y redes sociales, se silencian las voces disidentes; incluidas aquellas de científicos de amplia trayectoria, investigadores y médicos que han buscado la forma de dar a conocer alternativas que contribuyan a la recuperación y a la tranquilidad de las masas.
La censura ha sido promovida directamente desde el poder y las BigTech y dueños de las comunicaciones han cumplido la ordenanza.
La plandemia, un problema más político que sanitario
A lo largo de todo el manejo que se le ha dado a la pandemia, se ha podido observar claramente como esta se ha impuesto como mecanismo de control social, político y económico. La implementación de medidas ineficaces como el uso de mascarilla de forma obligatoria en muchos países del mundo y la represión con organismos de seguridad del Estado hacia todos aquellos que no están dispuestos a someterse, han dejado en evidencia que todo va más allá de medidas de protección sanitarias reales.
Tras más de un año y medio de haberse declarado la pandemia, el proceso agresivo de vacunación ha seguido su curso en los últimos nueve meses. La inoculación de sustancias experimentales se ha convertido en una condición obligatoria para acciones simples, que abarcan desde ir de compras, hasta poder recibir atención médica, solo si se está vacunado.
El control ejercido ha escalado hasta llegar al quiebre de negocios y economía local con el cierre obligatorio, distanciamiento social y entregas de ayudas económicas con el financiamiento el FMI, convirtiendo a los ciudadanos en seres cada vez más dependientes de los gobiernos.
El Foro de Davos y su empeño en avanzar hacia la agenda 2030
«En 2030 no tendrás nada y serás feliz». Con estas palabras es recordada la aseveración que resultaría del Foro de Davos hace tres años, y con el avance de la pandemia, el cambio se va forjando hacia un cambio global.
En enero de 2021, el pronunciamiento de Klaus Schwab dejó claro el logro que se está alcanzando con las operaciones de control político, social y económico que se ha facilitado de forma «casual» con el SARS-COV2.
Un aspecto positivo de la pandemia es que nos ha enseñado que podemos introducir cambios radicales en nuestro estilo de vida con gran rapidez. Los ciudadanos han demostrado con creces que están dispuestos a hacer sacrificios por el bien de la atención sanitaria y otros trabajadores esenciales y grupos de población vulnerables, como los ancianos. Es evidente que existe una voluntad de construir una sociedad mejor y debemos aprovecharla para garantizar el Gran Reinicio que necesitamos con tanta urgencia»… «Los ciudadanos ya están preparados para afrontarlo.
Klaus SchwabCuáles son los objetivos que se persiguen con la Plandemia
Si se hace un análisis objetivo de todo lo que gira en torno a la Plandemia, podemos no solo imaginar que objetivos se persiguen con su implementación; sino que también, podemos dar un vistazo a lo que se ha logrado con ella.
- Durante un año y medio, se ha disminuido considerablemente el número de personas ancianas especialmente en Europa.
- Con campañas mediáticas de miedo, se ha avanzado en el control de las masas y su capacidad de razonar más allá de lo que le ofrecen los medios oficiales.
- Se ha debilitado la mente de millones de personas a nivel mundial, que ahora ven como un sacrificio noble, ceder sus libertades, usar mascarillas inútiles e inyectarse sustancias experimentales, todo en pro de un «bienestar» colectivo.
- Las personas comienzan a renunciar al concepto de derechos individuales, para pasar a adoptar como «normal» el sacrificio propio a nombre de los derechos colectivos.
- Se ha logrado la inoculación sistemática de sustancias experimentales, ofreciendo a las masas un discurso enfocado a mejorar la situación, mientras que surgen «nuevas variantes» que aumentan el número de dosis a inocular.
- Los organismos de seguridad del Estado en diversos países, han comenzado a violar derechos humanos al libre tránsito, la libre expresión y el libre pensamiento.
- Se ha normalizado el acatar órdenes, por mucho que estas carezcan de lógica.
- Poco a poco, periodistas de distintos medios se han comenzado a pronunciar ordenando cacerías a todo aquel que no esté dispuesto a obedecer o a sacrificar sus derechos individuales, tal como sucede en la actualidad, cuando periodistas de medios impresos hacen llamados públicos al odio, discriminación y persecución a quienes no aceptan inyectarse sustancias experimentales.
- La creación de una matriz de opinión única.
- El incremento de grupos de control y verificadores en redes sociales, que censuran y controlan lo que se publica en las mismas.
- Un incremento de enfermedades respiratorias, cardiacas, neurológicas, aumento del número de abortos espontáneos y otras reacciones adversas a raíz de la inoculación de sustancias mal llamadas vacunas.
- Implementación de medidas dictatoriales y de control como vacunación forzada de menores.
- Creación de carnet de control de vacunación para acceder a servicios básicos, como compra de alimentos y uso del transporte público, así como despidos laborales, prohibición de asistencia a clases de niños y adolescentes que no porten mascarillas o estén vacunados, suspensión de pagos de pensiones a personas jubiladas.
- Prohibición de terapias alternativas para tratar el SARS COV2.
- Diagnósticos de demencia a personas que se niegan a realizarse test PCR como examen rutinario.
- Se ha logrado el quiebre de pequeñas y medianas empresas, mientras que las grandes corporaciones han visto incrementado su capital.
- Dueños de comunicación y principales accionistas de las grandes farmacéuticas han incrementado en millones de dólares su capital.
Pudiésemos seguir con la lista de todo aquello que están logrando con esta «pandemia», sin embargo nunca la terminaríamos. El factor miedo ha sido determinante para implementar la agenda de control más monstruosa de la historia de la humanidad. Un plan de connotación global que tal como expresa el fundador del Foro de Davos Klaus Schwab, ha logrado que la gente esté preparada…
JUSTICIA
Así como se han conformado grupos de médicos y periodistas que luchan por la verdad; a nivel mundial, especialmente en aquellos países en los que se pretende imponer la inoculación obligatoria, grupos de abogados se encuentran brindando asesorías y levantando querellas amparados principalmente por el Código de Núremberg y el Código de Bioética y derechos humanos de la UNESCO en 2005.