La glándula pineal, al ser la que está gobernada energéticamente por el chakra coronario y por el Sol, es la más importante de todo el sistema endocrino. En este artículo trataremos sobre su constitución, relaciones y funciones tanto en el sistema energético humano como en el cuerpo físico.
Qué son las glándulas endocrinas
Desde el ángulo de la medicina moderna, las glándulas endocrinas son órganos encargados de la producción de las diversas hormonas que necesita el organismo para su buen funcionamiento. Estas sustancias luego de producidas son liberadas de forma directa en la sangre y de allí son conducidas a todos los tejidos y órganos del cuerpo. Muchas funciones del cuerpo humano son reguladas por estas glándulas, así, el crecimiento y el desarrollo, el metabolismo y la reproducción.
Ahora bien, desde la mirada de la medicina holística, cada glándula endocrina está vinculada con cada uno de los 7 chakras que hacen parte del cuerpo sutil, cumpliendo así la función de ser el lugar en el que el ámbito energético y el cuerpo físico del ser humano se tocan.
En efecto, la energía cósmica que los chakras reciben, es trasmitida al sistema biológico humano a través de las glándulas endocrinas y el sistema nervioso, y de este modo pueda mantenerse equilibrado y saludable.
Si nos atenemos a la energía proveniente del sistemas solar, tenemos que la energía que emite cada plantea es recibida por un chakra en particular y este la trasmite al organismo por medio de una glándula determinada.
De este modo, tenemos que las suprarrenales reciben la energía de Júpiter y Saturno, el bazo la de Marte, el timo la de Venus, las tiroides la de Mercurio, la pituitaria o hipófisis la de la Luna y Neptuno, y la pineal la del Sol y Plutón.
La glándula pineal
La glándula pineal ha sido llamada por la tradición yógica la Glándula Rey, siendo la hipófisis la reina y el resto la corte. Y esto se ha considerado de esta manera porque el funcionamiento de todas las glándulas depende del funcionamiento de la pineal.
Fisiología de la glándula pineal
La glándula pineal es un pequeño órgano ubicado en el techo del diencéfalo. Entre las funciones que le atribuye la ciencia occidental moderna está la de regular los ritmos circadianos, es decir, aquellos que dependen de la alternancia del día y la noche y cuyo ciclo es de 24 horas, entre estos, el más importante es el de sueño-vigilia.
También posee la importante función de secretar melatonina, hormona con fuerte efecto sobre la acción gonadal. La melatonina, además, posee efectos oncostáticos (previene el cáncer), geroprotectores (retarda el envejecimiento), antioxidantes e inmunoprotectores (aumenta la respuesta inmune).
Funciones psicológicas de la glándula pineal
La función primordial de esta glándula desde el punto de vista psicológico es la socialización. Efectivamente, la correcta integración del individuo dentro de su círculo familiar, primero, y social, después, está regida por la pineal.
En un sentido más elevado, la glándula pineal es la que genera la inteligencia vincular, esto es, aquella energía que nos hace percibir los nexos inmanentes a todo lo existente, y ya no solo entre los humanos, sino entre estos y su entorno, así como con el resto del universo.
Cuando hay disfunción de este centro endocrino, la persona puede sufrir de desadaptación y fobia social, e incluso, en los casos graves, de sociopatía.
Funciones espirituales de la glándula pineal
En el ámbito espiritual la glándula pineal se relaciona con la fusión con el amor universal. Y en efecto, la melatonina, que es la hormona que segrega esta glándula, además de regular el sueño está relacionada con la capacidad de sentir amor incondicional.
Se dice que los niños pequeños segregan grandes cantidades de melatonina, razón por la cual duermen mucho, pero también, aman incondicionalmente. El hecho de que los bebés tengan la fontanela sin endurecer, por su parte, se relaciona con la recepción de información kármica que sigue llegando al humano en esa edad de su vida, actividad vinculada con la glándula pineal.
Al ser la glándula asociada con el chakra coronario, está vincula también con la creatividad y el despertar espiritual. Y en efecto, activando de manera correcta la glándula pineal se accede a niveles de creatividad nunca experimentados con anterioridad, del mismo modo, comenzamos a tener estados de conciencia más plenos y expandidos.
Pero puede operarse de manera inversa, es decir, la actividad creativa y las prácticas espirituales como la meditación, estimulan y desarrollan armónicamente la glándula pineal.
El yoga es también un buen ejercicio para desarrollar la glándula pineal, o las visualizaciones dirigidas, las cuales activan el hemisferio derecho del cerebro. Los baños relajantes, la aromaterapia, la gemoterapia y la acupuntura son otras opciones para trabajar en este importante centro endocrino-energético.
Ahora bien, cuando la glándula pineal se encuentra alterada, la persona podrá sufrir episodios psicóticos e incluso llegar a experimentar estados disociativos permanentes.
Glándula pineal: el camino a la salud integral
La glándula pineal está asociada a procesos físicos, psicológicos y espirituales claves para la salud integral del ser humano. Si logramos activar esta glándula, lograremos así mismo relaciones interpersonales más satisfactorias, una mejor salud física, así como estados de consciencia expandidos y pacíficos.